BATACAZO JUNTO A UN HISTORICO DEL FUTBOL ARGENTINO
René Houseman: “Me llena de orgullo que la gente todavía me recuerde”
Cancha del Club Excursionistas. Partido de la Primera División C. Una persona de contextura pequeña charla con un grupo de amigos en la platea. Es René Orlando Houseman, aquel puntero derecho que se cansó de eludir rivales con la camiseta de Huracán, de Defensores de Belgrano, de River Plate, del Colo Colo de Chile, de Independiente (sólo 3 partidos) y por último, de Excursionistas (un solo encuentro en 1984). Y que se lo recuerda por ser uno de los referentes de la Selección Argentina que ganó el campeonato del mundo en 1978.
-¿Cómo vive hoy René Houseman?
-Bien. Vivo muy bien. Estoy tranquilo, disfrutando de los momentos de ocio y viendo a Excursionistas o a Huracán.
La voz del estadio interrumpe la charla. Piden aplausos para el ex vicepresidente del club, Antonio Gords, quien falleció el 18 de agosto durante un partido de su equipo frente a Argentino de Merlo. La gente aplaude tibiamente, y eso hace enojar a Houseman. “Aplaudan la puta madre…”, dice entre dientes, y luego retoma el diálogo con Batacazo. “Espero que la gente no lo haya hecho a propósito. A Gords lo conocí y lo quise mucho, y se merece millones de aplausos. Es un dolor muy grande para toda la gente de Excursionistas, y el mejor regalo sería ascender a la Primera B Metropolitana”.
Houseman nació el 19 de julio de 1953 en La Banda, Santiago del Estero. Jugó 15 años al fútbol de manera profesional (alrededor de 350 partidos) y anotó 128 goles. Referente obligado de la celeste y blanca (55 partidos y 13 goles), tiene peso propio su opinión sobre el equipo.
-¿Cómo vio a la Selección en los Juegos Olímpicos?
-Muy bien. Muy buen juego. Un equipo muy ordenado con un gran acompañamiento del mediocampo gracias a Messi y Riquelme. Y ese chico Di María pinta para mucho más. Aparte tuvieron una defensa muy férrea y fue un equipo bárbaro. Ninguno me sorprendió. Se plantaron todos muy bien, y tienen un gran cartel.
Aparece un amigo suyo y simulan tener una pelea. Todo con risas de por medio.
-¿Le gustaría dirigir en algún equipo?
-Me encantaría dirigir en divisiones inferiores, ahí sería feliz. En Primera es muy comprometido, hay muchas presiones y responsabilidades. No me gusta porque te tenés que pelear todos los días con alguien y eso no va conmigo. Huracán y Excursionistas me han ofrecido hacerme cargo de sus planteles superiores. Ellos son lo más grande que tengo pero no, no tengo ganas de dirigir. Elijo a mi familia, y además el tema económico también es jodido porque lo que me pueden pagar lo gasto en viático
La charla deriva en sus recuerdos y ahí comienza a mirar distinto, hay algo de emoción en sus palabras. “Gracias a Dios la gente se acuerda de mí y eso me llena de orgullo. En la calle, en cualquier lugar siempre alguien me saluda. A veces la gente se olvida de otras cosas que son importantes y no se las debería olvidar. Pero de mí se acuerdan. Me gustaría que la gente me recuerde como lo que soy, una buena persona. Eso es lo más importante. El resto es secundario”.
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